Cerca de 50 migrantes de diferentes nacionalidades recibieron el Año Nuevo en el campamento ubicado en la zona sur de la ciudad, el cual tenía solo restos de cenizas del incendio generado el pasado domingo. La mayoría de estas personas, expresaron qué su deseo para este 2025 es llegar a la frontera con los Estados Unidos para lo cual buscarán trasladarse a Ciudad Juárez.
Durante la mañana del primero de enero del 2025, personas de origen venezolano y hondureño en su mayoría, tomaban los rayos del sol del nuevo año fuera de lo que quedó del campamento e incluso, recargados en una pared, viendo pasar los pocos autos que circulaban en el día feriado.
Adultos y menores de edad, algunos aún de meses, buscaban el calor de una fogata que ya prendían con mayor cuidado, toda vez que el fuego que consumió tarimas de madera y plásticos el pasado domingo, fue generado por las fogatas que se salieron de control.
Son pocos los que ya quedan de paso por la ciudad, ya que algunos tienen incluso un año ya habitando en el campamento; mientras otros se quedaron en la capital del estado desde que el tren de Ferromex los dejó en los patios.
La esperanza de la mayoría de los ahí presentes es poder llegar a la frontera de los Estados Unidos, con miras a cruzar al vecino país y estar en mejores condiciones de vida, asegurando que podrán cruzar sin ningún problema.
Armando, uno de los migrantes de origen hondureño, comentó que esperaba poder salir a Ciudad Juárez una vez que terminen las fiestas de año nuevo, por lo que ha estado trabajando limpiando algunos carros, dinero con el cual busca irse caminando a la frontera.
El joven fue cuestionado sobre el hecho en el que un agente de migración fue asesinado, hecho por el cual se detuvo a dos hombres de origen venezolano y a un colombiano por su presunta responsabilidad en la muerte el pasado lunes 30 de diciembre, por lo que comentó que no sabía nada del hecho, pero que la gente de migración a veces era mala con ellos.
Armando ya no quiso dialogar más con el reportero de esta casa editora, para lo cual tomó su mochila y se retiró al interior del campamento, donde dijo que descansaría un momento.