La esperanza de alcanzar el “sueño americano” sigue viva para una familia hondureña que, a pesar de las adversidades, lucha por salir adelante en Ciudad Juárez.
La familia, integrada por padres y tres hijos, llegó a esta ciudad hace siete meses con una cita del CBP One, que fue suspendida tras la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos.
“Las ilusiones siempre siguen. Así como uno sobrevive en el país de uno, tiene que sobrevivir en cualquier país que llegue, no haciendo maldades sino trabajando, haciendo el bien para poder obtener lo que uno quiere obtener”, mencionó Luis Alberto, padre de familia.
“Llegué con mi familia, que es mi esposa y mis tres hijos, uno de 16 años, 7 años y este de 2 meses, aquí nació, es juarense. Ya traíamos la cita de CBP One, todavía estamos inscritos, pero no sabemos si la van a reabrir”, comentó.
La familia paga renta por una habitación en la ciudad, ya que prefieren evitar los albergues debido a la alta concentración de personas.
“Vendo café, agua, paletas, cigarros, de alguna manera buscando cómo poder sustentar y poder ayudar a la familia. Yo quiero hacer vida aquí, arreglar mis papeles para ver si puedo establecerme y conseguir un buen trabajo. Con trabajo hay todo, sin trabajo no hay nada”, destacó Luis Alberto.
“No para todos es bonito, pero al que le guste el trabajo y luchar por la vida de cada quien, donde llegue y donde se pare, va a hacer lo que necesite hacer. Uno tiene que buscar la manera cómo poder sobrevivir”, resaltó.
La familia no tiene parientes en Estados Unidos, solo en Honduras, con quienes se comunican semanalmente.